Posted on 2015-02-03 00:00
Pla de Vegueries de 2016
Font: Vikipedia

Una pregunta: ¿Quién representa mejor los intereses de una persona que votó al PP en Barcelona? ¿Una candidata de la CUP de Barcelona o una candidata del PP de Tarragona? (Cambia partidos y províncias, hasta que te chirríe.)

Algunas de las propuestas que se han ido haciendo de la ley electoral catalana, propone cambiar la circunscripción de la província a la veguería. ¿La razón expuesta? Una forma de acercar la gente a su electorado. ¡Precioso!

Vuelvo a hacer la pregunta. ¿Quién representa mejor los intereses de alguien de alguien que votó a Iniciativa en Lleida? ¿Alguien de Convergència de Lleida? ¿O alguien de Iniciativa de Girona?

¿Hacer circunpscripciones más pequeñas acerca los electores a los elegido? Pues tal como està planteada la ley electoral va a ser que no.

La representatividad

Normalmente se consideran dos criterios para analizar la bondad de un sistema electoral. Por un lado, está la representatividad, es decir, en qué medida el parlamento es un reflejo mas o menos distorsionado de lo que piensa la ciudadanía. El criterio que se le suele oponer es la gobernabilidad: cómo de fácil o difícil es tirar adelante propuestas, partiendo de la suposición de que si no hay mayorías absolutas es complicadísimo.

Yo opino que el criterio de la gobernabilidad aquí a conveniencia de los que siempre gobiernan.

En todo caso, esta vez no se nos dice que las veguerías son buenas por la gobernabilidad. Se nos dice que así las personas elegidas estarán más cerca de los ciudadanos. Se juega la carta de la representatividad.

Por eso vuelvo a preguntar: ¿Quién representa mejor los intereses de alguien de alguien que votó a ERC en Girona? ¿Alguien de Ciudadanos de Girona? ¿O alguien de ERC de Barcelona?

Las circunscripciones

En otros artículos, hemos dejado patente que lo que principalmente hace que la representación no se parezca demasiado a lo que proporcionalmente piensan los ciudadanos, no es tanto la Regla de D'Hondt, que parte de culpa tiene, pero tiene más fama que culpa, sinó la partición en circunscripciones.

La partición hace que muchos votos no lleguen a sumar para llegar al escaño. Votos que si se juntaran con votos de otras circunscripciones si que llegarían. A los mayoritarios no les importa demasiado, porque la mayoría de sus votos tendrán escaño, y si el sistema actual les permite arrancar representación de los minoritarios, algo cogen.

La conclusión: ¿de qué me sirve que mi voto sirva para escoger personas que viven cerca si las personas que salen no son lo que he elegido?

Si hacemos las circunscripciones aún más pequeñas, hacemos el problema incluso más extremo.

**La intención clara de quien hace esta propuesta es beneficiar a las formaciones mayoritarias a costa de una escabechina en las minoritarias. Para nada es acercar a elegidas y electoras. **

Contra propuesta

Hacer circunscripción única. Repartir los escaños a las candidaturas si asignar la persona. Una vez repartidos por candidaturas, cada candidatura asigna la persona según los votos obtenidos por la candidatura en cada división territorial, sea la província o la veguería.

De esta manera tendríamos un mejor reflejo ideològico de la ciudadanía, y cierta desproporción territorial, si lo hacemos por D'Hondt y con tanta división ideológica. Estaríamos invirtiendo el efecto, pero para compensar eso tenemos las ponderaciones territoriales que ya aplicamos hoy y que sería material para otro artículo.

Actualización 2017-02-01: Aquest article de el Món té un interactiu prou esclaridor per comparar l'efecte de les circunscripcións a les darreres eleccions.